LA PALABRA POÉTICA Y SUS ESTIGMAS XV Walt Whitman ¡Adiós, fantasía mía!
¡Adiós, Fantasía mía! ¡Adiós, querida compañera, amor mío! Me voy, no sé adónde ni hacia qué azares, ni sé si te volveré a ver jamás. ¡Adiós, pues, Fantasía mía! Déjame mirar atrás por última vez. Siento en mí el leve y menguante tic tac del reloj. Muerte, noche, y pronto se detendrá el latir de mi corazón.
Durante mucho tiempo hemos vivido, gozado, y acariciado juntos, en deliquio. Ahora hemos de separarnos. ¡Adiós, Fantasía mía!
Pero no nos apresuremos. Largo tiempo, ciertamente, hemos vivido, dormido, nos hemos mezclado el uno con el otro. Si morimos, pues, moriremos juntos (sí, continuaremos siendo uno), si vamos a algún sitio, iremos juntos a afrontar lo que ocurra: quizás seremos más libres y alegres, y aprenderemos algo, quizás me estés ya guiando hacia las verdaderas canciones, (¿quién lo sabe?), quizás eres tú el mortal pomo de la puerta que deshace, gira... Finalmente, pues, te digo:
ADIÓS! ¡SALUD, FANTASÍA MÍA!
En Hojas de hierba,versión de Agustí Bartra
Delirante mi sentir he de soltarlo todo lo mejor no ha ocurrido lo que fui lo he deseado ¡Ay, Fantasía, todos hablan de ti pero eres mía! Marilú
Copyright Marilú Ferro. Marzo 2013. |